Los monstruos mentales y la entrevista

Ayer fui a mi futura secundaria a que me hicieran una entrevista. Estaba un poco nervioso, pero luego esos pocos  nervios se convirtieron en uno solo pero gigante. Esto fue lo que pasó:

Cuando llegamos la secretaria nos pidió que nos sentáramos que pronto estarían con nosotros. Nos sentamos, y esperamos como 10 minutos. Luego una señora que tenía entre 30 y 40 años salió despavorida y viéndonos ahí pregunto ¿Bruno? Y le dijimos que sí. Entramos en ese cuartito que solo media como 4 metros en total y en ese momento mis nervios se convirtieron en gigantes monstruos que me devoraban la mente con pensamientos mortales. La señora me aventó una ráfaga de preguntas como estas: ¿Qué es para ti la escuela? A lo que yo respondí: Un lugar feliz en donde uno se ve con los amigos de lunes a viernes. Otra de las preguntas a la que respondí fue: ¿Cuál es tu materia favorita? Yo dije: Las M4T3M4TIC4S. ¿Te gusta leer? Si, ¿Qué clase de libros? Los de misterio. Y aquí fue donde la regué ¿Cuáles libros has leído (en ese rato los monstruos ya me habían acabado la mitad del cerebro) Ehhhh… bueno pues he leído Gerónimo Stilton (acuérdense que en este momento nomas me quedaba un cuarto de mente) Este es el libro que leí:

Este pedazo de literatura chatarra fue lo que se me ocurrió:    

Y me preguntó que si es cierto que me gustaba el deporte y yo le dije que me encantaba que por cierto estaba seleccionado en el futbol para representar a Otago en la Copa de la Isla Sur. Luego me dejó descansar unos segundos y después. . . Me pregunto que con quien quisieras estar ahora que entres a Kavanagh college y yo le dije que con Dominic Morrison. Dararihd Lu y en ese momento la doña me paro y me dijo: oye, creo que tú puedes nombrar a toda tu clase. Le dije que sí porque todos los de mi clase son mis amigos. Luego mi papá le preguntó que si había problema con que me fuera a México el último trimestre de cada año, como siempre lo hacemos  y nos dijo que no,  que  hasta año doce  que vendría siendo en México el segundo año de prepa. Luego nos dio las gracias por venir y nosotros a ella por habernos recibido. Salimos  y nos fuimos. Ahora entiendo y culpo a los monstruos mentales de ponerlo a uno nervioso. Desde ahora trataré de trabajar para reconstruir los ¾ de mente que perdí ahí. Gracias.